Belmond Road to Mandalay

Birmania

El alojamiento

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La vida a bordo del Belmond Road to Mandalay

Los camarotes de gran lujo y repletos de detalles y mimos, así como los espacios amplios y relajados en los que mezclarse con los demás, asegurarán que tu viaje sea uno fascinante y lleno de comodidades. En los camarotes queda continuamente reflejada la elegante mezcla entre las tradiciones locales y el lujo más absoluto.

Cada camarote ha sido diseñado para combinar la comodidad con la elegancia, utilizando materiales y estilos locales. Adéntrate en el interior para descubrir un mobiliario cuidadosamente trabajado por artesanos locales.Â

Si quieres una experiencia aún más exclusiva, apuesta por la Governor’s Suite: con tu propio mayordomo que te asistirá en todo momento, disfruta de los amplios espacios de la joya de la corona del inigualable Belmond Road to Mandalay.

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Un toque de distinción

Prepárate para un viaje de sabores a bordo del Belmond Road to Mandalay: en este lujoso crucero, los recuerdos inolvidables se suceden sin cesar, pero pocos dejarán una marca tan profunda como la cocina. Descubre y disfruta con un menú nuevo, variado y seductor, que incluye tradiciones birmana, thai, india, indonesia y europea, y que nunca te dejará de sorprender.

Durante tu viaje por el río Ayeyarwady, podrás empaparte de la historia y la cultura de Birmania gracias a los expertos guías del barco. Disfruta aprendiendo con charlas después de la cena y con tours personalizados, tanto por templos de renombre internacional como por lugares en los que aún se desconoce el turismo intensivo.

Un viaje en el Belmond Road to Mandalay también significa mucho tiempo libre para descansar. Relájate con un tratamiento de spa especial, o date un chapuzón en la piscina. Por la tarde, no dejes de mimarte con cócteles originales y una cocina exquisita mientras compartes tus aventuras del viaje con otros pasajeros.

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Ver para creer

La plataforma de observación es el lugar perfecto para observar cómo es la vida en el río y en sus orillas. Aquí podrás tumbarte a tomar el sol, tomarte algo en el bar o darte un refrescante chapuzón en la piscina. Templos dorados, monjes vestidos con túnicas color azafrán, leyendas centenarias y gentes gentiles – en Birmania se refugian incontables maravillas esperando a ser encontradas.

Todos los días tienen un calendario completo de eventos, excursiones, actividades y una exquisita variedad de ocio y cocina. ¿Por qué no asistir a una charla de algún experto nacional o internacional y profundizar en tu conocimiento sobre Birmania?.

¿O quizá aprender a cocinar platos especiales típicos que luego podrás repetir en casa y maravillar a todos tus comensales, descubrir cómo se pone el longyi, la vestimenta tradicional local, o dar una clase de yoga al amanecer? ¿O simplemente te apetece relajarte, cóctel en mano, sobre la cubierta de madera de teca y observar los impresionantes paisajes que se suceden a tu alrededor en el río Ayeyarwady?

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La experiencia

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Una manera diferente de descubrir Birmania

El río Ayeyarwady, el mayor de Birmania, cruza el país de norte a sur, extendiéndose desde los Himalayas hasta el Mar de Andamán, y es la arteria principal por la que transcurre la vida del país, siendo aún hoy su ruta comercial más importante y transitada.

A lo largo de los siglos, la vida, las gentes y la economía de Birmania han dependido de este río como fuente vital y radical: ferris, balsas de bambú, barcazas y pesqueros comercian y recorren estas aguas a un ritmo relajado – no hay necesidad de ir con prisas en Birmania.

Desde hace siglos, la vida birmana se desarrolla en los alrededores de las riberas del imponente Ayeyarwady, lo que lo convierte en el punto de observación ideal para vivir de primera mano y en profundidad cómo es esta interesante nación. Asimismo, es posible que recorrer el río Ayeyarwady sea la manera más agradable de descubrir Birmania, de tomarle el pulso, vivir sus leyendas y comprender su historia.

Desde las casas construidas con bambú y en las que viven graciosos niños que corren por la orilla y mujeres con sus quehaceres cotidianos, hasta los carros tirados por bueyes con los que se cultivan los campos, un crucero fluvial por el río Ayeyarwady ofrece un punto de vista único sobre el verdadero modo de vida del país.

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Una Birmania de lujo a flote

Disfruta de los maravillosos paisajes, sonidos y olores de Birmania desde un lugar con vistas privilegiadas a lo largo de este lujoso crucero fluvial. Navega por el río Ayeyarwady apreciando los paisajes desde la lujosa cubierta, y desembarca para explorar pueblos rurales que parecen salidos de una época ya pasada, observa la vida cotidiana de los monjes con sus inolvidables túnicas de color azafrán y sus rituales diarios, y maravíllate con las agujas doradas de pagodas centenarias que asoman por encima de la exuberante selva.

El Belmond Road to Mandalay no es un crucero fluvial cualquiera: es un hotel de lujo a flote como no hay otro en Birmania. La ruta entre Bagan y Mandalay dura unos tres o cuatro días, el tiempo perfecto para disfrutar de las dos ciudades y de todos los tesoros que se encuentran en ruta, como el magnífico puente de madera de teca de U Bein, las majestuosas ruinas de Mingun y de Ava, la antigua capital imperial, o la sosegada Colina de Sagaing, donde se concentra la espiritualidad del país, así como gran parte de sus monasterios.

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Precio

Para disfrutar de este fantástico crucero y descubrir Birmania a bordo del Belmond Road to Mandalay o de cualquiera de nuestros viajes indícanos la duración, fecha de salida y servicios que deseas y pídenos presupuesto con toda libertad. Uno de nuestros expertos lo elaborará para ti.