Armenia
Y al fondo el monte Ararat.
En Armenia la historia parece pesar más que en cualquier otro lugar. Encerrada entre montañas, fue el bastión cristiano enfrentado a Asia y a los vecinos turcos, mientras mantenía a lo largo de los siglos una cultura con la que no pudieron ni los persas, ni los otomanos, ni los rusos.
Un paisaje duro, en el que conviven valles, lagos y cimas escarpadas, marca el carácter del país. Árido muchas veces, con sus viejos monasterios e iglesias de cubiertas picudas, esparcidas aquí y allí, y con templos y extrañas ruinas de civilizaciones antiguas, tiene el misterio propio de las tierras de frontera aisladas para protegerse de sus vecinos. Buena parte de los armenios vive fuera del país.
Para ellos Armenia es la tierra prometida y para el viajero es una experiencia singular donde descubrir, también, algunas de las más viejas raíces de Europa.
Una propuesta de viaje a un país singular. Encerrado entre las montañas del Cáucaso, y rodeado de países poderosos - Rusia, Persia, Turquía - en Armenia el cristianismo contuvo el empuje del islam y junto con un alfabeto propio, ha mantenido viva una cultura única.
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Un viaje para conocer lo mejor del Cáucaso: Armenia, un país con una cultura única y Georgia, una capital moderna, rodeada de una naturaleza extraordinaria, con mar y montañas.
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