Costa de Kenia

Kenia cuenta con más de 500 kilómetros de litoral, que forma parte de la conocida como Costa Swahili, donde históricamente ha prevalecido una mezcla de lo árabe y lo africano.

Mombasa, principal puerto y segunda ciudad en importancia del país, ocupa un inmenso islote unido artificialmente a tierra, rodeado de mar y al abrigo de una inmensa bahía. A pesar de no contar con las playas que disfrutan el norte y sur del país, la ciudad ofrece muchas atracciones al viajero. Destacan entre ellas la antigua ciudad árabe con estrechas y animadas calles, el viejo puerto y el Fuerte Jesús, construido por los portugueses a finales del s. XVI.

Por lo general, el litoral de Kenia suele resultar mucho más agradable en el Sur que en el Norte. La razón estriba en que en el norte la barrera de coral queda muy cerca de la playa, y por la mañana es muy difícil bañarse cuando la marea baja y hay que recorrer una distancia importante sobre un suelo agreste hasta alcanzar la orilla. En algunos lugares resulta imprescindible ponerse sandalias para bañarse, para evitar hacerse daño en los pies con los corales muertos.

Malindi, en la parte norte, tiene buenas playas y está muy cercana al Parque Nacional Malindi y del Parque Nacional Marino Watamu. Malindi es apropiado para los que gusten del snorkel y el buceo de superficie o con botella.

La Isla de Lamu es una importante referencia. El sabor árabe y la tranquilidad de sus playas se unen a la encantadora capital, declarada Patrimonio de la Humanidad, donde el paso del tiempo parece haberse detenido.

En el Sur, destacan los enormes arenales de Tiwi y Diani Beach, con sus playas inmensas que parecen no tener fin. Para practicar el buceo es ideal la Isla de Chale y Msambweni, donde se puede disfrutar de una playa aún no muy explotada con bellos acantilados. La Isla de Funzi es perfecta para los que buscan alejarse del mundanal ruido y aislarse en un remanso de paz.