Tailandia
Entre playas y selvas: el país de las sonrisas.
El reino de Tailandia ha estimulado la imaginación de los viajeros desde antiguo. No es para menos, porque el país es luminoso, animado y cordial. Es fuente de continuas sorpresas, de monumentos exquisitos, de escenas llenas de vida, de muestras de una cultura tan exótica y anclada en el pasado como viva y actual.
Bangkok, la capital, acostumbra a ser el lugar de encuentro con el país y ofrece en la propia ciudad y en los alrededores lugares de interés más que suficientes para dedicarle un tiempo. Palacios, museos, templos, mercados, espacios naturales… forman parte del patrimonio de Bangkok y del repertorio de cosas que ver para el viajero.
El norte de Tailandia es también un punto de atracción. La vegetación y el clima tropical dan forma al paisaje y también a los pueblos donde arraigan minorías étnicas de singular interés. Chiang Mai, Chiang Rai y Mae Hong Son forman los puntos principales de una región fronteriza con Laos y Birmania, que permaneció mucho tiempo aislada y que mantuvo, además de un entorno natural privilegiado, viejas tradiciones y formas de vida.
Tailandia tiene muchas playas atractivas. Samui puede ser la mejor opción. Es una pequeña isla, lejos de las aglomeraciones y con una naturaleza espléndida. Será una buena excusa para terminar un viaje, gozando del sol y del agua y descansando tranquilamente del ajetreo de los días pasados.
El norte de Tailandia, con sus vivas tradiciones y modos de vida rurales, se combina con una estancia en Bangkok y unos días de descanso en las playas de Samui para hacer un viaje tan lleno de interés como variado.
Una propuesta singular para disfrutar de los alojamientos más exclusivos y lujosos del mundo.
Disfruta de las maravillas naturales del norte de Tailandia en alguno de los más espectaculares hoteles de Asia, para finalizar en las playas de la isla de Koh Samui.
Vivir el magnífico espectáculo de los restos arqueológicos de Camboya junto a una naturaleza espléndida: una propuesta para conocer Luang Prabang, los templos de Angkor, y terminar en las maravillosas playas de Tailandia.
En un tren decorado con el glamour de tiempos pasados: una manera romántica y elegante de viajar entre Bangkok y Singapur, para terminar con unos días de playa en la isla de Langkawi.
Los paisajes y costumbres más tradicionales de Asia, sus templos más emblemáticos, y algunas de las mejores playas del Golfo de Tailandia.
Viaje en grupo para descubrir Tailandia, uno de los milagros económicos de Asia y dejarse sorprender por sus paisajes, tradiciones y por la amabilidad de sus gentes.