Koh Samui
Las islas Samui se encuentran en el golfo de Tailandia, en la costa oriental de la península malaya. Forman un archipiélago con más de 80 islas e islotes, de las que solo seis están habitadas. Son islas paradisíacas, de relieve montañoso y cubiertas de vegetación, con playas de arena blanca y un mar que esconde unos fondos llenos de vida submarina, perfectos para el buceo.
La isla más grande, Koh Samui, es la más hermosa y también la más visitada. De relieve montañoso, las colinas, cubiertas de bosques y vegetación siempre verde, se elevan cerca del mar. Koh Samui tiene magníficas playas y excelentes instalaciones hoteleras, algunas de ellas con villas privadas y espectaculares vistas sobre el mar.
Desde ellas se puede recorrer la isla a pie o adentrarse en ella por caminos que atraviesan la jungla, en coche o a lomos de un elefante. Es un lugar de descanso, con un impactante paisaje tropical y toda la tradición de hospitalidad y exquisita gastronomía tailandesa.
Los paisajes espléndidos y el vivir al aire libre para descansar en la playa y practicar deportes acuáticos son un regalo que ha dado renombre y con ello animación al archipiélago entero. La isla de Koh Phan-Ngan, más pequeña y al norte de Koh Samui, es famosa por sus Full Moon Party, que se celebran cada luna llena en la playa. Son fiestas jóvenes y relajadas, que reúnen a viajeros -sobre todo mochileros- de todo el mundo. La isla, cubierta de cocos, tiene también buenas playas para bañarse y excelentes sitios para bucear, con arrecifes coralinos, multitud de peces y aguas claras.
Los mejores momentos para visitar Samui son entre diciembre y abril y entre junio y finales de agosto, cuando hay menos lluvias.
El norte de Tailandia, con sus vivas tradiciones y modos de vida rurales, se combina con una estancia en Bangkok y unos días de descanso en las playas de Samui para hacer un viaje tan lleno de interés como variado.
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