Creta
Creta es la mayor de las islas griegas. Tiene forma alargada y mide 257 kilómetros de un extremo a otro por unos 60 kilómetros de ancho. En Creta, cruce de las rutas de navegación mediterráneas, nació la primera civilización bañada por el Mediterráneo, la Minoica.
Montañas de gran altura se alzan en el centro de la isla. Alternan las mesetas con los fértiles valles, el paisaje es en muchos lugares quebrado y cambiante y la vegetación, abundante, se muestra rica en árboles frutales. Destacan en medio del variado paisaje las capillas abandonadas, los monasterios, los pueblos tradicionales, las costas rocosas, las playas, bien de guijarros o arena, y los castillos, entre otras maravillas. En las áreas no cultivadas prosperan los bosques de castaños, encinas y cipreses que combinan con las palmeras, y los cedros. Y, para completar un panorama tan mediterráneo, se dan las hierbas medicinales y las plantas aromáticas.
Creta se ha desarrollado como destino turístico, pero su tamaño y la riqueza de sus atractivos compensa la afluencia de visitantes. Las aguas templadas, que bañan sus inmensas playas bordeadas de tamarindos, hacen de ella un lugar ideal para disfrutar de la arena y del sol. En el interior, el relieve montañoso crea un espacio lleno de contrastes, lo mismo que los pueblos y ciudades ofrecen continuas ocasiones para detenerse y gozar de los mejores momentos.
Herakion, la capital, el monasterio de Moni Arkadi, las ciudades de Retimno y de Chania a orillas del mar, las gargantas de Samaria y la playa de Elafonisi, además de las famosas ruinas de Knosos componen un pequeño catálogo de todo lo que ofrece Creta.
Una escapada para disfrutar, con guía privado en español, algunos de los lugares más carismáticos de la Grecia continental: Atenas, los monasterios de Meteora y el santuario de Delfos. Un viaje que puedes completar con algunos días de descanso en las islas griegas.
Por el norte de Grecia, un pequeño recorrido, en coche de alquiler, combinando una ciudad histórica, Tesalónica, importantes restos arqueológicos, playas y la oportunidad de acercarse al Monte Athos.
Una propuesta para visitar Atenas y disfrutar de unos días de relax en el exclusivo y elegante Amanzoe, un remanso de paz diseñado al estilo clásico griego.