Italia
El grand tour del arte clásico.
Italia es un prodigio de belleza y sensibilidad. En pocos lugares la historia ha dejado tantas y tan bellas huellas del pasado para sorprender todavía al viajero, que queda atrapado por su exquisitez.
Pero, además, Italia es una auténtica explosión de vitalidad. Los italianos son expansivos, ocurrentes y animosos, y ese carácter se contagia a las ciudades y los pueblos, donde la vida fluye y crea una atmósfera animada y contagiosa.
Desde las últimas estribaciones de los Alpes y las llanuras que discurren a sus pies, hasta el extremo de Sicilia, un fabuloso panorama se despliega ante quien se propone visitar Italia. La naturaleza es especialmente bella, y prueba de ello es la región de los grandes lagos o la Toscana, con el manto de colinas y pequeños montes que le dan forma.
El litoral de la costa amalfitana es un privilegio y compone una de las más bellas estampas de la costa del Mediterráneo. Las ciudades, grandes y pequeñas, poseen una riqueza imposible de superar y ofrecen, cada una, los ambientes más variados y seductores.
Ruinas monumentales, playas, palacios, animadas trattorias, museos, callejuelas estrechas, plazas, catedrales... todo es posible de encontrar en cualquier lugar de esta Italia donde el viajero se encontrará como en casa.
Un placer para los sentidos: un viaje para disfrutar de algunos de los hoteles con más glamour y encanto de la costa amalfitana, y que mejor conservan las huellas y el orgullo de su pasado.
El legendario Venice Simplon-Orient-Express ofrece una experiencia de viaje como ninguna otra. El romance, la aventura y el glamour al estilo art déco están íntimamente ligados a este mítico tren que realiza varias rutas por distintas ciudades europeas aunque la más demandada es la ruta que une Venecia con París, en ambos sentidos.