Archipiélago Svalbard
Localizado en el Océano Glacial Ártico, el archipiélago de Svalbard, las costas frías, mencionado por primera vez en textos islándicos del siglo XII, ha fascinado a los viajeros durante años. Fauna única, naturaleza ártica y antiguos pueblos mineros se encuentran en estas islas, que emanan una belleza propia, austera y misteriosa. Hoy en día, Svalbard es además Destino Sostenible certificado, un reconocimiento que se concede a aquellos destinos que trabajan de forma sistemática para reducir los efectos negativos del turismo.
Además de unos miles de osos polares, las islas albergan unos 3.000 habitantes, tres cuartas partes de los cuales viven en Longyearbyen, el centro administrativo y uno de los mayores asentamientos del archipiélago. Esta pequeña y colorida comunidad ha pasado de ser un típico pueblo ballenero a una población moderna con diferentes tipos de negocios e industrias, y con un sorprendentemente amplio rango de actividades y oportunidades culturales, tales como conciertos, espectáculos, festivales y exposiciones.
A pesar de su localización, Svalbard disfruta de un clima relativamente suave comparado con otras zonas del mundo a la misma latitud, gracias a la corriente cálida del Golfo que lo baña. En Longyearbyen las temperaturas medias oscilan entre los -14°C en invierno y los 6°C en verano.
Históricamente, tanto la caza común como la de ballenas han sido actividades practicadas por el hombre en el archipiélago, pero hoy en día la sostenibilidad es lo que prima en todos los aspectos de la vida en este lugar: casi dos tercios de la superficie de Svalbard están protegidos, incluyendo tres reservas naturales, seis parques nacionales, 15 santuarios de aves y una zona protegida especial de interés medioambiental.
Para disfrutar la naturaleza y los paisajes del Ártico noruego en los meses de verano, y realizar diversas actividades de aventura: navegación por glaciares, safaris en lancha rápida, piraguas de mar o trekking.
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