Islas Cook
El paraíso soñado.
Las islas Cook son un remoto paraíso tropical situado en el otro extremo del mundo. Estas islas verdes, con inmaculadas playas y perfectos picos volcánicos, y rodeadas de kilómetros de aguas azules, están lejos de todo y son un perfecto refugio para escapar del mundo.
Este pequeño territorio independiente está formado por 15 islas situadas al norte de Nueva Zelanda y ofrece paisajes únicos, con islas montañosas cubiertas de vegetación y sencillos atolones coralinos totalmente llanos. El mar es claro y cálido y hay una rica vida submarina para los aficionados al snorkel y el buceo.
Las islas se dividen en dos grandes grupos: las del norte, de origen coralino, y las del sur, de origen volcánico. Hoy en día, las Islas Cook cuentan con unos 20.000 habitantes, la mayoría de ascendencia polinesia o polinesio-maorí. Funcionan como un estado con autogobierno independiente, aunque sus habitantes poseen también la nacionalidad neozelandesa.
El clima es excepcional, templado todo el año. La época de lluvias, entre diciembre y abril, tiene días más nublados, pero es raro que llueva mucho y el resto del año la temperatura es paradisíaca, con una suave brisa marina que mitiga el calor.
Reúne en un viaje las dos grandes islas de Nueva Zelanda con las islas Cook y disfruta, primero de la naturaleza virgen de bosques, montañas y fiordos, para terminar con una estancia en la idílica y remota isla coralina de Aitutaki.