Schlössle Hotel

Este pequeño hotel boutique en el corazón del casco antiguo de Tallín, traslada al huésped al pasado medieval de la ciudad. Antigua casa de comerciantes del siglo XIII, se ha adaptado a los nuevos tiempos sin perder nada de su encanto.

Dispone de 23 habitaciones con personalidad diferente, provistas de imponentes vigas de madera, ventanas barrocas, tapices y muebles antiguos.

Las zonas comunes son cálidas, con detalles estructurales que muestran su esplendor original: la fantástica chimenea, las puertas enmarcadas en piedra y las hojas de acanto pintadas en el techo.

Ofrece servicios de masajes y una auténtica sauna estonia antigua en el sótano, que se puede privatizar. Incluso, dar un paseo en carruaje a caballo por las calles empedradas. Para los que lleguen en coche, cuenta con parking propio.

• Su restaurante Stenhus es uno de los mejores de la ciudad. Cocina lituana con productos locales, en un ambiente íntimo con chimenea de leña.

• Dos lugares especiales dentro de las zonas comunes: El Cigar Bar, un lugar para relajarse y tomar una copa, con unas formidables paredes de piedra y muebles de diseño. Por otro lado y sólo en los meses de verano, el patio se adorna con flores, árboles y cadenas de luces en la noche para crear un ambiente acogedor y romántico donde disfrutar de un cocktail.

• Miembro de la prestigiosa cadena de hoteles Leading Hotels of the World, ha tenido entre sus huéspedes a multitud de personalidades de todos los ámbitos, desde la Reina Isabel II a Status Quo o Bon Jovi.